Mantener una alimentación balanceada con elementos que te
proporcionen los nutrientes necesarios y que te aporten la mayor cantidad de
beneficios debe ser una de tus mayores preocupaciones.
Es por eso que hoy queremos darte diez razones para consumir
avena, gracias a la gran cantidad de cualidades que tiene este cereal. ¿Lo has
incorporado a tu dieta? ¡Luego de leer esto lo harás!
A través de la historia, la avena ha sido un alimento
despreciado. Antiguamente era considerada una plaga de los cultivos y luego un
alimento para animales. Hoy en día, sin embargo, se sabe que son muchos los
beneficios que trae al consumo humano.
¿Por qué comenzar a comer avena?
Primero, es una fuente de fibra, aportando el 12% de la que
necesitas al día con solo consumir dos cucharadas.
Segundo, ayuda a mantener los índices glicémicos. Retrasa la
digestión y permite absorber mejor los hidratos de carbono.
Tercero, le proporciona al cuerpo beta glucosa y fibras
solubles, que reducen los niveles de colesterol malo.
Cuarto, al ser una fibra previene el estreñimiento. Para
aprovecharla en este sentido, debe ser consumida con algún líquido.
Quinto, estimula el funcionamiento regular del intestino. De
esta forma, pasa menos tiempo entre el consumo del alimento, su digestión y su
eliminación.
Sexto, aporta energía, al ser rica en hidratos de carbono.
Si necesitas energía en diferentes momentos del día, puedes consumirla sin
problemas.
Séptimo, aporta saciedad. La misma fibra de la avena
ralentiza la digestión, por lo que te sientes lleno durante más tiempo.
Octavo, aporta vitaminas y minerales. Consumir avena te dará
vitamina B1 y B2, además de magnesio y hierro.
Noveno, perfecta opción a la hora de elegir una merienda
para la mitad del día. De esta forma, evitas pasar hambre y necesitar una
comida pesada a la hora del almuerzo. Puedes consumirla en hojuelas, como un
delicioso batido e incluso en forma de galleta.
Décimo, es un alimento versátil. Puedes prepararla sola de
diferentes maneras, o también añadirla como ingrediente en las recetas de tus
alimentos diarios.
Fuente: SaludNatura.net