Se ha determinado que existen
muchas posibilidades que las personas que tienen problemas cuando son adultos
con respecto a su carácter, actitud, forma de tratar a las demás personas y su
poco entusiasmo de lograr cosas, se deben a la crianza que le dieron sus
padres.
El experto
en liderazgo y autor de best-sellers de psicología Tim
Elmore, ha realizado diferentes investigaciones donde ha determinado una
pequeña lista de esos errores que cometen los padres a la hora de la crianza de
sus hijos, haciendo que estos se sientan inseguros y con pocas motivaciones al
éxito a lo largo de sus vidas.
Esta es la lista de
cosas que los padres y las madres deben de evitar hacerle a sus hijos, de esta
manera conocerán los errores que NO deben cometer.
Lista de los errores
de crianza más comunes
- No permitir que los
hijos tomen riesgos: eliminar el riesgo o evitar que suceda causa arrogancia,
insolencia y baja autoestima. Vivimos en un mundo donde hay peligros a cada
paso, los padres no deben proteger siempre a sus hijos, deben dejarlos que
tomen riesgos, que fallen y caigan, para que sepan que es algo normal.
- Correr en su ayuda
demasiado pronto: esto causa que los hijos siempre crean que alguien correrá
para salvarlos siempre, pero eso no sucede en el mundo real, el mundo adulto.
Esto es rodearlos de cuidados excesivos y nunca es bueno.
- Entusiasmarse muy
pronto: el elogio constante y la obtención de premios tiende a causarle a estos
niños una sensación de siempre es fabuloso en lo que hace. Esto no sucederá con
todas las personas y es cuando dudará de la credibilidad de sus padres, querrá
ser tramposo y mentiroso sólo para obtener un premio.
- Permitir que la
sensación de culpa reemplace el buen comportamiento: es bueno que los niños
aprendan a luchar por lo que quieren, por ende es bueno no mimarlos tanto, no
complacerlos siempre, hay que decirles “no” o “ahora no”, ya que si la relación
se basa en objetos materiales, cuando estos cesen ya no habrá sentimientos.
- No contarles los
errores que han cometido en el pasado: debes dejar que ellos mismos cometan sus
errores, especialmente en la adolescencia, no los prevengas sino que cuéntales
cómo te sentiste o lo que aprendiste de esos errores, pero deja que ellos se
enfrenten a ellos y aprendan de las consecuencias.
- Confundir intelecto
con madurez: ser inteligente o habilidoso no lo hace maduro ya que no hay una
edad o un momento donde la madurez hace presencia. Observa el comportamiento de
tu hijo y el de los demás, si ves que los demás son más autónomos, es posible
que estés frenando a tu hijo.
- No aplicar lo que
se predica: actúa según tus propias normas, eres el modelo a seguir de la
familia y especialmente de tus hijos. Si quieres que ellos respeten tus reglas
y las de la vida, tú también hazlo.
Fuente: Ento2.net